Empieza un nuevo curso lectivo. Volvemos al proyectos con muchas ganas y nuevas ideas.
El curso lectivo pasado, debido principalmente a las restricciones COVID y que no podíamos utilizar las instalaciones con el alumnado, nos focalizamos en desarrollar el proyecto desde un punto de vista técnico y crear material para que, tanto el alumnado como otros posibles profesores, pudieran replicar la experiencia por ellos mismo. Cómo fruto de este trabajado vió la luz la guía para implementar un sistema de monitorización de huerto utilizando arduino y raspberry pi.
Este año, con cierta incertidumbre debido al COVID, queremos focalizarnos más en que sea el alumnado el que desarrolle el trabajo, manifieste sus inquietudes, dirija el desarrollo y tome decisiones sobre qué y cómo hacerlo. Por supuesto, el profesorado estará ahí para guiar al alumnado, intercambiar opiniones y ayudar en todo lo necesario. Pero nos gustaría que el alumando diese ese pasito que nos faltó el año pasado y que siempre ha estado en el centro de nuestro proyecto. Que el alumnado tome propiedad del proyecto. Lo que los anglosajes denominan ownership.
Por supuesto no va a ser una tarea sencilla ni de un día para otro. Se trata de una labor constante, donde el alumno irá creciendo en conocimientos y seguridad, y donde, poco a poco, casi sin darse cuenta, irá tomando decisiones sobre el proyecto. De esta manera es cómo realizaremos esa transición de propiedad del proyecto entre el profesorado y alumnado.
No sabemos hasta donde llegaremos pero estamos seguro de que se trata de un punto clave para el propio desarrollo del alumnado y que, llegemos a donde lleguemos, será positivo para el alumnado, y no solo habrá crecido en conocimientos si no también en responsabilidad y autonomía.